Localizado en el corazón del distrito Burj Khalifa, The Opus fue diseñado para Omniyat y alberga el primer hotel de la cadena Meliá Hotels International en Oriente Medio. Este proyecto es la obra póstuma de Zaha Hadid y promete convertirse en uno de los establecimientos más emblemáticos del segmento premium de la compañía hotelera.
Concebido en su totalidad por la arquitecta anglo-iraquí, la estructura de uso mixto está conformada por dos torres independientes que se conectan en un todo singular, a través de un puente colgante, asumiendo el volumen de un cubo. El mismo forma un gran vacío central que define la arquitectura del edificio, proporcionando diferentes ejes visuales para el entorno. La fluidez de este espacio interior, que cruza más de ocho pisos del hotel, contrasta fuertemente con la geometría ortogonal.
Las dos torres comparten el mismo vestíbulo, un atrio de altura cuádruple y luego se vuelven a conectar a través de un volumen de puente de 71 metros de altura. Dicho volumen -suspendido de tres pisos y 38 metros de ancho- alberga varios restaurantes, así como un bar en la azotea, una piscina reflectante y 5.000 metros cuadrados de espacios para oficinas. El diseño no tiene columnas en las placas del piso, por lo que los interiores maximizan las vistas desde el interior y la luz natural para las oficinas.
ESTRUCTURA
Está formado por dos torres de hormigón armado, conectadas por un pódium a nivel del suelo y por un puente asimétrico de acero, con losas compuestas y fachadas planas de acero y cristal. Cada una de las torres, a partir del lobby, tiene su propio núcleo. El cubo está tallado o erosionado por un vacío de forma libre y está estructurado por un sistema convencional de losas apiladas verticalmente y atendidas por núcleos centrales, lo que permite que las áreas cercanas a la fachada se ocupen en los ocho lados.
PUENTE
Se llevaron a cabo predicciones de desviación y monitoreo. Se utilizaron puntales de compresión temporales para construir las columnas colgantes de abajo hacia arriba; y se usaron conexiones de agarre de fricción para reducir gradualmente la carga en los puntales de compresión, a medida que las columnas colgantes recibían cargas permanentes. Asimismo, colocaron una plataforma temporal de 40 metros entre las dos torres a una altura de 100 metros. Una estrategia de articulación inteligente, en la cual la estructura salía en voladizo desde cada torre hasta que se instaló la sección clave. Las conexiones finales se manipularon para replicar un sistema de “rodillo fijo” que aisló la plataforma de la temperatura y movimientos diferenciales de las torres, lo que redujo significativamente el tonelaje de acero. La plataforma se utilizó para instalar la fachada en el sofito del puente.
EL VACÍO
La parte interior está revestida con un muro cortina de doble acristalamiento, especialmente diseñado. Los vidrios están tintados y curvados permitiendo vistas llamativas a través del “vacío”. La fachada de vidrio está diseñada con patrones reflectantes en forma de estrías pixeladas, que se aplican sobre el vidrio para proporcionar un grado de reflectividad, al tiempo que reduce el resplandor solar dentro del edificio.
Los cristales laminados de alto rendimiento de las fachadas están teñidos de azul. Se requirió un análisis de geometría preciso y un modelado 3D para definir todas las diferentes curvaturas de la superficie del vidrio. Con tres pisos, 38 metros de ancho y un peso de casi 1.000 toneladas, el puente y el vacío de ocho pisos están revestidos con 4.500 paneles azules de medianoche, con triple acristalamiento. Por último, el sistema LED de luces programables externas está integrado en las juntas de los cristales que rodean el vacío del edificio.
DISEÑO
Los diseños fueron presentados por primera vez en 2007 y su construcción debía completarse en 2018, pero se retrasó debido a complicaciones en la construcción. El llamativo edificio ha ganado premios por su impresionante diseño, incluido el Proyecto de Ocio y Hospitalidad del Año en los Premios de Arquitectura de Oriente Medio (2017).