Sean simples o con muchos detalles, de colores vivos o más pálidos, de dimensiones grandes o incluso más pequeñas de lo usual; la situación es que los acabados son los elementos fundamentales que reflejan la identidad de una construcción.
En ese sentido, si queremos hablar de destellos de vida en construcciones, es imposible no pensar en las entradas de luz. Justamente, como todos los años, se llevó a cabo la Semana del Mueble de Milán -Salone del Mobile Milano- que además de presentar tendencias mobiliarias, celebra al diseño. Entre lo más destacado del evento se resaltó la transición hacia adaptar espacios para que las entradas de luz sean netamente naturales, en lugar de incrementar el uso de luz artificial.
Para las paredes, las texturas vuelven a estar en tendencia sobre los colores llanos. Elementos gráficos y geométricos -en forma de tapices- se apoderan de cada centímetro de los muros para demostrar una mayor creatividad. De la misma manera, el uso de materiales vistos es cada vez más apetecible.
“Los acabados de imitación han irrumpido en el mercado con la llegada de materiales y procesos que hacen que los proyectos y las actualizaciones del hogar sean más accesibles desde el punto de vista de los costes”, destaca David Steckel, experto en hogar de Thumbtack, en referencia al uso de acabados de imitación para conseguir el aspecto del yeso veneciano o para imitar el hormigón o el mármol.
Por último, el “negro es el nuevo blanco” según destaca Steckel. Estamos viendo un gran interés por los neutros oscuros y los naturales. Por ejemplo, en los paneles de madera natural con un tinte oscuro, o incluso gente que se atreve a pintar la casa de negro son cada vez más populares. Esperamos que esta tendencia siga ganando adeptos en el futuro inmediato”, finaliza Matt Mosher, cofundador de Dzinly.