Esto con el fin de atender a las viviendas del sector de Solanda, en el sur de la capital, que fueron afectadas por la construcción del Metro de Quito. La empresa municipal señala que los daños han sido evaluados y categorizados con base en el riesgo y la vulnerabilidad por la Secretaría General de Seguridad y Gobernabilidad, en donde registraron 276 quejas de viviendas que presentan afectación en menor y mayor grado, las cuales evidencian fisuras y asentamientos, entre otros daños.
Sin embargo, según informó el Metro de Quito, un estudio realizado por la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, en 2018, determinó que existen otras posibles causas que han acelerado el hundimiento paulatino de las casas en este lugar. Entre ellas determinan que encontraron:
-Mala calidad del suelo.
-Nivel freático alto (cantidad de agua que se filtra bajo el suelo).
-Problemas en el sistema de alcantarillado.
-Prácticas de construcción antitécnicas.
Un comité interinstitucional fue creado con varias secretarías y empresas municipales para definir una hoja de ruta y atender a los afectados. Según informaron, hasta el momento han realizado una identificación y categorización de las viviendas. También, indicaron que han intervenido 1,9 kilómetros con bacheo rutinario en las calles más dañadas.
Según el Metro de Quito, las mesas de trabajo están conformadas por funcionarios de la Secretaría de Territorio, Hábitat y Vivienda; la Empresa Pública Metropolitana de Hábitat y Vivienda; la Secretaría General de Seguridad y Gobernabilidad; la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop); la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps); la Dirección de Catastros y la Administración Zonal Eloy Alfaro.
Texto original tomado de El Universo.