Uno de los pilares para el desarrollo de las ciudades es la inversión inmobiliaria. Esta tiene la capacidad de revalorizar diferentes puntos en las ciudades y aumentar la plusvalía de los sectores. A raíz de esa idea, la construcción de urbanizaciones se ha incrementado en Ecuador, con Guayaquil y Quito concentrándose como los principales puntos de construcción de grandes urbanizaciones.
Si queremos conocer cuándo se construyeron las primeras urbanizaciones en esta zona hay que remontarse a finales de los años 60. En ese momento, la construcción del puente de la Unidad Nacional fue el eje conector de desarrollo al permitir el enlazamiento entre Samborondón y Guayaquil.
En la actualidad, existen más de 170 ciudadelas, conjuntos habitacionales y urbanizaciones según el Municipio de Samborondón. La ubicación cercana al río fue de los puntos principales que aportó a la exploción urbana del sector.
Durante 2020, uno de los proyectos anunciados fue el ‘Nuevo Samborondón’; una obra que consta de un proyecto moderno, innovador, sostenible y planificado que busca concentrar actividades comerciales, recreacionales y residenciales. El proyecto contará con 2300 hectáreas.
Además, está conformado por tres polos de desarrollo que son: el Parque Central con acceso desde todas las zonas residenciales; en el sector sur, un desarrollo de uso mixto y en el este, construcciones cerca al río babahoyo.